Planteamientos Generales y Objetivos
ANEXO/1/ENE/2014/
ANTECEDENTES GENERALES Y OBJETIVOS
En Israel, hay una población hispana parlante cercana a las 140 mil personas, de las cuales, casi 70 mil son de origen argentino y alrededor de 5.000 y algo más son de origen chileno. Estos últimos, en su mayoría son judíos, un número menor no judíos y un porcentaje significativo, son residentes temporales por causa de actividad laboral o de estudios.
Mirada esa cifra en el contexto global de la población de Israel, es apenas un guarismo modesto y que finalmente se traduce en una nula o muy escasa aportación e influencia en el contexto nacional israelí.
Los chilenos en Israel, no tienen ninguna orgánica o grupo formal que aglutine siquiera un centenar de personas y si bien es cierto, existe registro de 3 entidades con características formales, ninguna de ellas corresponde o satisface los intereses propios de una comunidad de personas, en este caso, la de chilenos residentes en Israel.
Dos entidades que realizan alguna actividad cultural con menguada relación de integración con los chilenos, es más bien una actividad grupal de unas pocas personas que no lograron o no quisieron traspasar su actividad para integrar la diversidad de chilenos y más bien se transformaron en agrupaciones de influencias a nivel personal que de comunidad de chilenos efectivamente integrada y representativa.
Lo anterior, ha hecho posible en gran medida que los chilenos residentes en Israel, se encuentren dispersos y prácticamente no tengan actividades grupales que tengan alguna relevancia a nivel local, ni menos a nivel de autoridades del país y ni siquiera en relación con la representación diplomática o consular de Chile, por lo que la comunicación de esta última, siempre se ha canalizado en las dos instituciones dirigidas, ambas por las mismas persons y que han hegemonizado esa relación.
La necesidad en el mundo de los colectivos sociales, es actuar cohesionados y organizados, ninguno de esos factores existe actualmente entre los residentes chilenos. En particular, tratándose de inmigrantes, adquiere mayor relevancia, toda vez que una entidad formal, organizada, activa y dinámica, primero facilita la integración de los que llegan, más allá de la característica propia de la alía, reservada exclusivamente a los chilenos judíos.
Influir y gravitar profesionalmente o en cualquier ámbito y por tanto incidir o poder convertirse en un agente que sea escuchado en la elaboración de cualquier tipo de ley que norme a los habitantes de un país, es un desafío gigantesco y representa lo óptimo de integración en la vida de un país. Por supuesto esto no será posible, en un colectivo o comunidad desprovista de cualquier organización y objetivos.
ANEXO/1/ENE/2014/
Una comunidad de inmigrantes nunca rompe definitiva y totalmente los lazos con el país de origen, siempre hay aspectos de la vida del inmigrante que tendrán una consecuencia, ya sea en el país desde donde emigró o el país al cual migró, cualquiera que sea el caso (Trabajo, previsión, salud Derecho sucesorio e incluso derechos electorales), por esa razón, un colectivo organizado, tendrá mas posibilidades de obtener resultados en esos ámbitos de protección (o desprotección) de derechos civiles.
Los inmigrantes en general, no ocultan en ningún país del mundo en el que residan en esa calidad, conservar acciones y derechos para influir a la distancia en los aspectos que les sea posible incidir, por lo que buscan crear entidades fuertemente estructuradas que les permitan alcanzar esos objetivos.
Los chilenos en Israel, no estamos ajenos a ninguno de estos factores.
ESTRUCTURA
La estructuración de una organización, no es fácil y puede resultar compleja. Sin embargo, si no se cuenta con una voluntad de participación y cooperación activa, puesto que se trata de crear ideas, organizar y asumir responsabilidades y no siempre los destinatarios de estas organizaciones están dispuestos a asumirlas o comprometerse en realizar acciones para lograr los objetivos, puede hacer que cualquier iniciativa sea inalcanzable.
Establecer objetivos tampoco es una tarea simple, pero la naturaleza de la organización en este caso, permite tenerlos presente casi de inmediato y se pueden reseñar en unos pocos ámbitos.
I.- Intereses entre los comunitarios
II.- Intereses de la comunidad con el país en que se reside, e
III.- Intereses de la comunidad y las organizaciones y autoridades tanto en el país receptor, como con las del país de origen.
Así, y entendido como presupuesto básico necesario, una comunidad, en este caso de “chilenos residentes en Israel”, en el primer ámbito existe muchísima labor que desarrollar, porque abarca todas las actividades de la vida cotidiana, caso en el cual, según la opinión del autor de este prospecto de creación comunitaria, debe abocarse la entidad, sólo una vez que ha logrado consolidarse en número de asociados como organización, para solo entonces y mediante la participación de profesionales en las áreas específicas, elaborar informes que permitan desarrollar medidas de integración entre los comunitarios y propender a mejores expectativa de vida.
En la segunda área de intereses y relacionadas con las relaciones con el país en el que se reside, en particular, tiene características especiales, por la connotación en la administración estatal de un componente religioso, debiendo adecuarse a esos status y no olvidando que la comunidad también la integran comunitarios laicos. Por otra parte y en el ámbito netamente civil, también es importante lograr construir vasos comunicantes con organizaciones estatales del país de acogida, por la especial característica de aislamiento a que se somete al Estado de Israel en una campaña de propaganda y deslegitimización, por lo que una entidad comunitaria, fortalecida en su organización y actividades, puede llegar a transformase en un coadyuvante importante del Estado donde se reside.
Finalmente, y quizás en una primera etapa de acción organizada de la comunidad estructurada, se encuentre mayor facilidad de actuación y acción, en el tercer aspecto, porque la organización puede acometer un acción efectiva y efectista, en la medida que cuente con los recursos humanos para ello y no atenta contra esa actividad, que la organización paralelamente vaya desarrollando su estructura funcional y territorial.
OBJETIVOS
Entendiendo que se trabaja en el tercer orden de intereses reseñados en una etapa primaria, esto es, -"Intereses de la comunidad y las organizaciones y autoridades tanto en el país receptor, como con las del país de origen"-, se pueden establecer objetivos a corto, mediano y de más largo aliento:
A.- Objetivos de corto plazo
De organización
1.- Diseños de una estructura funcional y territorial de la organización.
2.- Establecimiento de una matriz de representantes en esta etapa organizativa.
3.- Elaboración de un cuerpo reglamentario por el cual se regirá la organización.
4.- Formalización jurídica legal de la organización
De tareas prácticas
1.- Elaboración de planes y proyectos referidos a la contribución inmediata en difusión y hasbara como tarea prioritaria para la organización y los comunitarios en esta fase.
2.- Coordinación con las autoridades diplomáticas chilenas, de acciones y tareas conjuntas destinadas al fomento de las buenas relaciones entre ambos países y sus ciudadanos, como por ejemplo:
a.- Distribución de instructivos para visitantes israelíes a Chile, con las normas prácticas que deban mantener presente cuando visiten el país.
b.- Elaboración de propuestas de trabajo conjunto para fomentar el turismo recíproco entre los ambos países, su cultura, música y mucho más.
3.- Buscar desarrollar tareas conjuntas con las organizaciones judías y no judías en Chile, para colaborar en la lucha contra la desinformación existente en Chile acerca de la realidad de Israel, sus conflictos y otras coyunturas de orden político que atentan contra una sana convivencia y contra cualquier posibilidad de Paz.
4.- Articular acciones con la Comunidad judía local en Chile y otras entidades y autoridades chilenas, tendientes a contrarrestar el creciente antisemitismo en los medios de comunicación chilenos.
B.- Objetivos de mediano plazo
De organización
1.- Incorporación de asociados
2.- Implementar la organización funcional y territorial de la comunidad
3.- Implementación de la normativa reglamentaria y jurídica de la organización comunitaria, formalizada ante las autoridades competentes.
De Tareas prácticas
1.- Tareas conjuntas con organizaciones locales para aunar esfuerzos y estrechar relaciones culturales entre los pueblos.
2.- Fomentar las relaciones de hermanamientos de ciudades, como herramienta de integración.
C.- Objetivos de largo plazo
Tanto en el terreno de las tareas prácticas y de organización, son múltiples las tareas a desarrollar y en ésta etapa, la contribución a estos objetivos en ideas y tareas concreta, es fundamental, por esa razón, en este apartado, la aportación de los adherentes a la organización comunitaria es fundamental, por lo que a manera de primera conclusión, es amplio el marco de ideas a trabajar y desarrollar., por lo que se hace inoficioso abundar en más detalles en este aspecto.
TAREA INMEDIATA
A.- Informar y traspasar a los destinatarios naturales de este objetivo comunitario, sean estos, chilenos judíos, chilenos no judíos, chilenos israelí, chilenos no israelí, chilenos laicos, chilenos de residencia temporal por causa laboral, de estudios, o por que se han incorporado a Tzhal (IDF), la necesidad de articular y estrucurar una Comunidad que los incluya a todos.
B.- Establecer un cronograma de cumplimiento de etapas para la estructuración comunitaria.
C. Establecer contactos con las autoridades diplomática chilenas en Israel, las autoridades locales de Israel, organización comunitarias en Israel y en Chile, para que fomenten el fortalecimiento de una entidad que represente o intente representar con la mayor amplitud, los interes de todas las personas a las que les une un denominador común, chilenos que emigraron de Chile a Israel.
D.- No desmayar en la iniciativa por la aparición de obstáculos es fundamental. No faltarán las dificultades y "piedrecitas" que algunos puedan sentirse alentados poner en el camino, para impedir la realización y concresión de la iniciativa comunitaria. Más eso no impedirá y no puede impedir un anhelo natural y obvio de las personas, que se reconocen dispersos, sin capacidad de influir y con escaso poder de convocatoria en temáticas que son de importancia para los dos Estados que forman parte de sus vidas, Chile e Israel, o Israel y Chile.
LA TAREA ES DE USTEDES, USTEDES SON LOS ÚNICOS QUE PUEDEN CAMBIAR ESTA HISTORIA ORGANIZANDOSE COMUNITARIAMENTE.
ANTECEDENTES GENERALES Y OBJETIVOS
En Israel, hay una población hispana parlante cercana a las 140 mil personas, de las cuales, casi 70 mil son de origen argentino y alrededor de 5.000 y algo más son de origen chileno. Estos últimos, en su mayoría son judíos, un número menor no judíos y un porcentaje significativo, son residentes temporales por causa de actividad laboral o de estudios.
Mirada esa cifra en el contexto global de la población de Israel, es apenas un guarismo modesto y que finalmente se traduce en una nula o muy escasa aportación e influencia en el contexto nacional israelí.
Los chilenos en Israel, no tienen ninguna orgánica o grupo formal que aglutine siquiera un centenar de personas y si bien es cierto, existe registro de 3 entidades con características formales, ninguna de ellas corresponde o satisface los intereses propios de una comunidad de personas, en este caso, la de chilenos residentes en Israel.
Dos entidades que realizan alguna actividad cultural con menguada relación de integración con los chilenos, es más bien una actividad grupal de unas pocas personas que no lograron o no quisieron traspasar su actividad para integrar la diversidad de chilenos y más bien se transformaron en agrupaciones de influencias a nivel personal que de comunidad de chilenos efectivamente integrada y representativa.
Lo anterior, ha hecho posible en gran medida que los chilenos residentes en Israel, se encuentren dispersos y prácticamente no tengan actividades grupales que tengan alguna relevancia a nivel local, ni menos a nivel de autoridades del país y ni siquiera en relación con la representación diplomática o consular de Chile, por lo que la comunicación de esta última, siempre se ha canalizado en las dos instituciones dirigidas, ambas por las mismas persons y que han hegemonizado esa relación.
La necesidad en el mundo de los colectivos sociales, es actuar cohesionados y organizados, ninguno de esos factores existe actualmente entre los residentes chilenos. En particular, tratándose de inmigrantes, adquiere mayor relevancia, toda vez que una entidad formal, organizada, activa y dinámica, primero facilita la integración de los que llegan, más allá de la característica propia de la alía, reservada exclusivamente a los chilenos judíos.
Influir y gravitar profesionalmente o en cualquier ámbito y por tanto incidir o poder convertirse en un agente que sea escuchado en la elaboración de cualquier tipo de ley que norme a los habitantes de un país, es un desafío gigantesco y representa lo óptimo de integración en la vida de un país. Por supuesto esto no será posible, en un colectivo o comunidad desprovista de cualquier organización y objetivos.
ANEXO/1/ENE/2014/
Una comunidad de inmigrantes nunca rompe definitiva y totalmente los lazos con el país de origen, siempre hay aspectos de la vida del inmigrante que tendrán una consecuencia, ya sea en el país desde donde emigró o el país al cual migró, cualquiera que sea el caso (Trabajo, previsión, salud Derecho sucesorio e incluso derechos electorales), por esa razón, un colectivo organizado, tendrá mas posibilidades de obtener resultados en esos ámbitos de protección (o desprotección) de derechos civiles.
Los inmigrantes en general, no ocultan en ningún país del mundo en el que residan en esa calidad, conservar acciones y derechos para influir a la distancia en los aspectos que les sea posible incidir, por lo que buscan crear entidades fuertemente estructuradas que les permitan alcanzar esos objetivos.
Los chilenos en Israel, no estamos ajenos a ninguno de estos factores.
ESTRUCTURA
La estructuración de una organización, no es fácil y puede resultar compleja. Sin embargo, si no se cuenta con una voluntad de participación y cooperación activa, puesto que se trata de crear ideas, organizar y asumir responsabilidades y no siempre los destinatarios de estas organizaciones están dispuestos a asumirlas o comprometerse en realizar acciones para lograr los objetivos, puede hacer que cualquier iniciativa sea inalcanzable.
Establecer objetivos tampoco es una tarea simple, pero la naturaleza de la organización en este caso, permite tenerlos presente casi de inmediato y se pueden reseñar en unos pocos ámbitos.
I.- Intereses entre los comunitarios
II.- Intereses de la comunidad con el país en que se reside, e
III.- Intereses de la comunidad y las organizaciones y autoridades tanto en el país receptor, como con las del país de origen.
Así, y entendido como presupuesto básico necesario, una comunidad, en este caso de “chilenos residentes en Israel”, en el primer ámbito existe muchísima labor que desarrollar, porque abarca todas las actividades de la vida cotidiana, caso en el cual, según la opinión del autor de este prospecto de creación comunitaria, debe abocarse la entidad, sólo una vez que ha logrado consolidarse en número de asociados como organización, para solo entonces y mediante la participación de profesionales en las áreas específicas, elaborar informes que permitan desarrollar medidas de integración entre los comunitarios y propender a mejores expectativa de vida.
En la segunda área de intereses y relacionadas con las relaciones con el país en el que se reside, en particular, tiene características especiales, por la connotación en la administración estatal de un componente religioso, debiendo adecuarse a esos status y no olvidando que la comunidad también la integran comunitarios laicos. Por otra parte y en el ámbito netamente civil, también es importante lograr construir vasos comunicantes con organizaciones estatales del país de acogida, por la especial característica de aislamiento a que se somete al Estado de Israel en una campaña de propaganda y deslegitimización, por lo que una entidad comunitaria, fortalecida en su organización y actividades, puede llegar a transformase en un coadyuvante importante del Estado donde se reside.
Finalmente, y quizás en una primera etapa de acción organizada de la comunidad estructurada, se encuentre mayor facilidad de actuación y acción, en el tercer aspecto, porque la organización puede acometer un acción efectiva y efectista, en la medida que cuente con los recursos humanos para ello y no atenta contra esa actividad, que la organización paralelamente vaya desarrollando su estructura funcional y territorial.
OBJETIVOS
Entendiendo que se trabaja en el tercer orden de intereses reseñados en una etapa primaria, esto es, -"Intereses de la comunidad y las organizaciones y autoridades tanto en el país receptor, como con las del país de origen"-, se pueden establecer objetivos a corto, mediano y de más largo aliento:
A.- Objetivos de corto plazo
De organización
1.- Diseños de una estructura funcional y territorial de la organización.
2.- Establecimiento de una matriz de representantes en esta etapa organizativa.
3.- Elaboración de un cuerpo reglamentario por el cual se regirá la organización.
4.- Formalización jurídica legal de la organización
De tareas prácticas
1.- Elaboración de planes y proyectos referidos a la contribución inmediata en difusión y hasbara como tarea prioritaria para la organización y los comunitarios en esta fase.
2.- Coordinación con las autoridades diplomáticas chilenas, de acciones y tareas conjuntas destinadas al fomento de las buenas relaciones entre ambos países y sus ciudadanos, como por ejemplo:
a.- Distribución de instructivos para visitantes israelíes a Chile, con las normas prácticas que deban mantener presente cuando visiten el país.
b.- Elaboración de propuestas de trabajo conjunto para fomentar el turismo recíproco entre los ambos países, su cultura, música y mucho más.
3.- Buscar desarrollar tareas conjuntas con las organizaciones judías y no judías en Chile, para colaborar en la lucha contra la desinformación existente en Chile acerca de la realidad de Israel, sus conflictos y otras coyunturas de orden político que atentan contra una sana convivencia y contra cualquier posibilidad de Paz.
4.- Articular acciones con la Comunidad judía local en Chile y otras entidades y autoridades chilenas, tendientes a contrarrestar el creciente antisemitismo en los medios de comunicación chilenos.
B.- Objetivos de mediano plazo
De organización
1.- Incorporación de asociados
2.- Implementar la organización funcional y territorial de la comunidad
3.- Implementación de la normativa reglamentaria y jurídica de la organización comunitaria, formalizada ante las autoridades competentes.
De Tareas prácticas
1.- Tareas conjuntas con organizaciones locales para aunar esfuerzos y estrechar relaciones culturales entre los pueblos.
2.- Fomentar las relaciones de hermanamientos de ciudades, como herramienta de integración.
C.- Objetivos de largo plazo
Tanto en el terreno de las tareas prácticas y de organización, son múltiples las tareas a desarrollar y en ésta etapa, la contribución a estos objetivos en ideas y tareas concreta, es fundamental, por esa razón, en este apartado, la aportación de los adherentes a la organización comunitaria es fundamental, por lo que a manera de primera conclusión, es amplio el marco de ideas a trabajar y desarrollar., por lo que se hace inoficioso abundar en más detalles en este aspecto.
TAREA INMEDIATA
A.- Informar y traspasar a los destinatarios naturales de este objetivo comunitario, sean estos, chilenos judíos, chilenos no judíos, chilenos israelí, chilenos no israelí, chilenos laicos, chilenos de residencia temporal por causa laboral, de estudios, o por que se han incorporado a Tzhal (IDF), la necesidad de articular y estrucurar una Comunidad que los incluya a todos.
B.- Establecer un cronograma de cumplimiento de etapas para la estructuración comunitaria.
C. Establecer contactos con las autoridades diplomática chilenas en Israel, las autoridades locales de Israel, organización comunitarias en Israel y en Chile, para que fomenten el fortalecimiento de una entidad que represente o intente representar con la mayor amplitud, los interes de todas las personas a las que les une un denominador común, chilenos que emigraron de Chile a Israel.
D.- No desmayar en la iniciativa por la aparición de obstáculos es fundamental. No faltarán las dificultades y "piedrecitas" que algunos puedan sentirse alentados poner en el camino, para impedir la realización y concresión de la iniciativa comunitaria. Más eso no impedirá y no puede impedir un anhelo natural y obvio de las personas, que se reconocen dispersos, sin capacidad de influir y con escaso poder de convocatoria en temáticas que son de importancia para los dos Estados que forman parte de sus vidas, Chile e Israel, o Israel y Chile.
LA TAREA ES DE USTEDES, USTEDES SON LOS ÚNICOS QUE PUEDEN CAMBIAR ESTA HISTORIA ORGANIZANDOSE COMUNITARIAMENTE.